¿Son Mejores los tintes sin amoníaco o no?
Cuantas veces no escuchamos que los tintes sin amoníaco son orgánicos y que son más beneficiosos para nuestra salud. ¿Pero será verdad esto? ¿Podemos creer todo lo que leemos en internet o redes sociales sobre los beneficios de un producto? Sí, a veces todo se vuelve muy confuso, ya que encontramos artículos a favor y otros en contra. Y sobretodo alrededor de este tema existe una industria multimillonaria que busca a toda costa defender el uso de su ingrediente estrella. En mi investigación traté de buscar personas independientes o científicas que pueden explicarnos sobre el tema de una manera imparcial, como es el caso de la Dra. Odile de Fernández, sobreviviente de cáncer e Irina Webb, madre de un niño con eczema que ha aprendido a leer ingredientes. También me apoyé con las páginas como EWG, Think Dirty y PubMed.
Comencemos explicando porque son necesarios estos dos compuestos químicos para la eficacia de los tintes permanentes. Para que un tinte de cabello penetre en el cabello, algo corrosivo debe abrir primero la cutícula del cabello. Sí, escuchen bien: CORROSIVO. Estemos claros que los tintes permanentes al final y al cabo debilitan la hebra capilar. Si queremos tener un color duradero debemos recurrir a los tintes permanentes que entran en la cutícula y este proceso es bastante agresivo. El amoníaco es una de las mejores sustancias para lograr este objetivo. Como puedes imaginar, este proceso es perjudicial para tu cabello. Todos los colores de cabello permanentes usan esta técnica para hacer que el color permanezca más tiempo y cubra incluso las canas más resistentes. En otras palabras, alguna sustancia corrosiva hace que un tinte para el cabello sea permanente.
El amoníaco, también conocido como gas de amonio, es un compuesto químico derivado del nitrógeno. Se caracteriza por tener un olor muy fuerte que resulta desagradable al percibirlo, sin embargo al tener la composición de gas, se evapora una vez entra en contacto con el cabello y permite que la cutícula vuelva a su estado natural.
Si no se usa amoníaco en los tintes permanentes entonces hay que buscar un sustituto que tenga la capacidad de abrir la cutícula, ya que sin este proceso es imposible que entre el color al cabello. El sustituto más utilizado es la etanolamina o 2-aminoetanol o monoetanolamina, abreviado como ETA o MEA, que irónicamente es un derivado del amoníaco que se mezcla con óxido de etileno, para que no tenga ese olor tan fuerte. Por eso, no es sorprendente que la etanolamina también tenga un olor a amoníaco, aunque no tan fuerte como ésta. Entonces, si es similar al amoníaco, ¿porque es más peligroso en los tintes?
Bueno el óxido de etileno lo hace mucho más dañino al ser éste un ingrediente cancerígeno de acuerdo a EWG SKIN DEEP y al no ser gas en su totalidad tiene una concentración mayor en las formulaciones de los tintes para que tenga la capacidad de abrir la cutícula. ¿Que significa esto? Bueno, si la etanolamina, no se evapora al tener el contacto con el cabello entonces tiene la capacidad de quedarse mucho más tiempo dentro de la hebra capilar y el cuero cabelludo ocasionando mayores problemas a futuro. Significa que la cutícula puede permanecer abierta causando horquetillas y que el color del tinte salga más rápido del cabello o causando cambios de color con el tiempo. También el cuero cabelludo queda mucho más sensible causando posibles dermatitis de contacto e incluso caída del cabello. Por esto es imperativo enjuagar el tinte durante 5 minutos bajo el grifo para eliminar cualquier rastro de etanolamina en el cabello y cuero cabelludo. Si se deja aunque sea un poquito entonces pueden ocurrir algunas de las situaciones mencionadas: irritaciones en el cuero cabelludo como dermatitis, eczema, psoriasis, caspa por resequedad, caída y debilitamiento del cabello, horquetillas, cubrimiento de canas no duraderas y lavado del tinte.
Por ello es importante leer en los ingredientes cuál es el sustituto del amoníaco en los tintes. Evitemos a toda costa tintes con etanolamina que causan caída del cabello y mayor debilitamiento de la hebra capilar. Si por alguna razón no hay otra opción en el salón entonces pídanle a su estilista que le enjuague el cabello por lo menos 5 minutos bajo el grifo del lavacabezas, esto asegurará sellamiento de cutícula y menos probabilidad de irritaciones.
Lo mejor es buscar tintes con bajo porcentaje de amoníaco en sus formulaciones e ingredientes que sean antioxidantes para contrarrestar el efecto corrosivo del tinte permanente. Los mejores antioxidantes en este caso es el reservatrol derivado de la uva, queratina vegetal de las plantas y aceite de argán. Así lograremos mantener nuestro cuero cabelludo y cabello siempre saludable.
Comments